Silencio abierto consiste en la exposición
de papeles fotográficos vírgenes, así como la producción
de sobres silencio abierto, que contienen en su interior una serie
de papeles fotográficos vírgenes.
Este proyecto propone de manera explícita una participación activa
al espectador. No hay nada impresionado en los papeles que se exponen, ya que
lo que se expone es el mismo acto de exposición fotográfica
de unos papeles vírgenes que se velan progresivamente con la luz y el
tiempo.
Por lo tanto aparentemente no hay nada que mirar sobre los papeles de Silencio
abierto. Pero al mismo tiempo sí creo posible una experiencia de
parte del espectador, algo activo y dinámico que le invita a ser creativo,
a construir una imagen de y desde su propia experiencia.
Silencio abierto básicamente trata del momento en que la luz roza
lo que es sensible, y lo transforma. Luz y tiempo y espectador- se combinan
para crear diferentes densidades de color sobre las superficies sensibles. Quizás
se podría decir que el proyecto trata de exponer el momento
fotográfico.
Los papeles, velados en el instante decisivo, van transformándose a lo
largo de los días de la exposición constante a la luz. La transformación
es rápida al principio y más lenta a lo largo de los días.
Pero siempre hay transformación.
Como antecedente del sobre photolatente, el sobre silencio
abierto abre campos de relación y transacción con el espectador.
Abrir o no abrir el sobre será decisión de cada uno. Y cada uno
decidirá igualmente qué hacer con el material sensible que hay
en su interior, material susceptible de ser velado, pero también de ser
impresionado y revelado, procesado, manipulado
creado.
Oscar Molina, 2005
silencio
abierto